viernes, 31 de julio de 2015

95ª COMPETICIÓN: GRAN FONDO ÉZARO: CICLISMO EN ESTADO PURO

Sábado, 4/7/15, 10:00 h.
Cicloturista Gran Fondo Ézaro (Dumbría, La Coruña)
Distancia: 137.2 km (tb. 103.5 km)
Dificultad: media (subida final durísima)
Inscripción: 30 euros (+ 12 euros licencia de 1 día)
Tiempo: 6h 07' 57" (1º: 4h 47' 49")
Puesto: 421 de 800
Avituallamientos: agua, fruta, pastelitos, isotónico..
Trayecto desde Betanzos: 1h 40' - 123 km
Puntuación: 9/10
Repetiría: SI
CLASIFICACIÓN
Después de unas duras pruebas de tri y empezando las vacaciones tocaba disfrutar de una prueba esperada desde hace varios meses, una carrera que tenía trazas de convertirse en una fiesta por el recorrido y el ambiente que se iba a vivir, teniendo en cuenta que éramos 1000 inscritos y más de 10 compañeros del Triatlón Coruña. Así que confiaba en que esta marcha cicloturista me quitara el mal sabor de boca que me quedó con mi resultado en el Olímpico del Northwest en As Pontes. Vamos con la crónica.
7:00 h. Aunque mis compis han quedado sobre esta hora, mi religión no me permite levantarme antes de las 7 para una prueba, así que confío en mi "puntualidad de última hora" y madrugo lo justo. Eso sí, apuro con el
desayuno y salgo "en hora" para llegar sin prisas. Conseguido. Me planto en Ézaro sobre las 9, aparcando sin problemas y coincidiendo con Fer y algunos más antes de recoger los dorsales. Me despido de Patri y hago en la bici los 500 metros que me separan de la zona 0, cojo los dorsales sin colas y me junto al resto de flechas rojas que van a disputar la prueba. Muy buen ambiente, nada de nervios y muchas ganas de pasarlo bien. Mientras le hacen una entrevista a Indurain y a Chiapucci comentamos quién va a hacer el recorrido largo o el corto y si vamos a ir juntos o no. En principio quedamos en ir todos juntos y hacer el largo... ¡ese equipo! La prueba es muy fácil de resumir, un recorrido de 137.2 km en los que todo el mundo piensa únicamente en los últimos 1500 metros, la temible subida al mirador de Ézaro con rampas cercanas al 30% y que hace que esta prueba sea un reto y una aventura como la que estamos a punto de vivir. Da igual que antes haya kilómetros rompepiernas o un puerto de 10 km. Aquí todo el mundo piensa en esa subida, en si será capaz de hacerla sin bajarse de la bicicleta, en el tiempo que hará, en cruzar esa meta con la satisfacción de haber superado una de las cimas más míticas y duras de la geografía gallega. Y con esta idea, a las 10:15 más o menos, partimos los 1000 participantes de la carrera con los de la elástica roja colocados en posiciones retrasadas con el ánimo de pasar un día inolvidable sobre las 2 ruedas.
Por suerte, el día estaba perfecto, sol y nubes y temperatura ideal, no hacían falta ni los manguitos. Nada más salir, toca subida. Y como yo soy de los de guardar para el final, se me escapa el resto del grupo aunque los controlo a unos 300 metros. Y es que subir sin calentar cerca de 3 km en torno a un 5-6%... pues no me apetece gastar antes de tiempo, y menos si es sin competir. En el llano vuelvo a enlazar y disfrutamos la 1ª hora pasando por varios pueblos y llegando al primer avituallamiento en Muxía. Parada obligatoria. Ya sabía yo que no hacía falta correr. Después de unos 30 km nos obligan a parar, así que aprovechamos para comer y beber algo, hacer unas fotos, charlar un rato... Nos tienen allí casi 20 minutos, yo creo que demasiado tiempo pero es lo que toca, a ver si después no pagamos la arrancada. Aprovecho para ir al baño y... empiezan a salir. Me tocó. Así que tengo que remontar de nuevo para coger a los del equipo. Menos mal que al salir de
Muxía hay un cuestón de 2 o 3 km que aprovecho para unirme al grupo. A partir de aquí, recorrido gallego, sube y baja continuo pero eso sí, pedaleando entre amigos y sin prisas, todo "marcha sobre ruedas". Por ahora, disfrutando de una gran mañana de ciclismo. Sabemos que lo duro aún está por llegar. En una cuesta a Jesús se le sale la cadena y el grupo se descompone un poco, dudando si parar o seguir suave. Al final nos caza y paramos todos juntos en el siguiente avituallamiento, muy completitos aunque bastante caos con gente por todos lados. Al igual que el anterior, me lío con la cámara y tengo que volver a "calentarme" para cazar al resto. Para completar la mitad de la marcha tenemos que subir Ézaro por la otra cara y bajar el famoso "muro de Ézaro", quizás para irnos haciendo a la idea de lo que nos
íbamos a encontrar al final. En la subida me quedo un poco rezagado con Carlos y la bajada... buff, clavo frenos desde el principio y justo en el hormigón veo a Alex parado a la derecha y casi no me dan las manos para frenar. Qué mala suerte, le rompió la cubierta y tiene que abandonar. Le animo a que hable con los de la organización y que se la arreglen pero no tiene buena pinta. Así que sigo la bajada con un poco de miedo pensando que me voy a quedar sin frenos. Las ruedas chirrian, pero es que la bajada es brutal. Por fin puedo soltar las manetas, relajar las manos y volver a pasar por el arco de meta para completar la otra mitad de la prueba. Con la parada con Alex el resto del equipo deben estar lejos, en una larga recta al salir de Ézaro ni los veo, me parece raro que no hayan parado. Aprieto un poco y cazo a
Sergio y a Carlos, uno dudando si desviarse por la carrera corta (Sergio) y el otro (Carlos) intentando convencerle para que siga por la larga. Yo me mantengo sin opinar, porque Sergio acaba de hacer un ironman hace 6 días y él sabrá cómo está de fuerzas. Seguimos los 3 unos cuántos kilómetros y llegamos al desvío de los que hacen la corta y los de larga. Como Carlos y yo vamos a la larga al final Sergio se anima y también viene. Del resto del equipo ni rastro. Poco después Sergio empieza a pedir papas y nos arrepentimos de haberle animado a que eligiera "sufrir más tiempo". Así que decidimos arroparle a rueda y que lo llevara lo mejor posible.  Llegamos a una zona con rectas muy largas y nos encontramos con Juan, otro del equipo que nos dice que van más adelante y que no se deben haber dado cuenta de dónde estamos. En esos momentos nos pasan 4 integrantes de un equipo que van a buen ritmo y a relevos. Hablo con Carlos y decido pegarme a ellos para
ver si cazo a "la tropa" antes del puerto de Paxareiras y hacemos la subida todos juntos. Conseguido. Después de unos 15 km dándole zapatilla consigo coger a Fer y compañía y les aviso que vienen los demás detrás, lo que le pasó a Alex (que no se habían enterado) y que bajen un poco el ritmo. Dicho y hecho. Entramos en Muros y paramos tranquilamente en el avituallamiento, llevamos 100 km y algunos ya van entrando en reserva. Llegan Sergio, Juan y Carlos y ya estamos todos juntos para hacer los últimos 35 km con las 2 subidas fuertes de la jornada. En un gran ambiente y sin ninguna prisa, casi sin darnos cuenta, giramos a la izquierda e iniciamos el puerto de Paxareiras, cerca de 10 km de subida no muy pronunciada  (sobre el 6%) pero que con los kilómetros acumulados va pasando factura. Al iniciar hago el amago de irme, pero casi sin querer nos vamos distanciando y Carlos y Toni se unen. Así que decidimos mantener el ritmo y sobre el km 
3 Toni se queda y nos vamos Carlos y yo. Miro hacia atrás y ni se les ve, así que apretamos otro poco y pasamos a gente sin parar, se nota que hemos ido de paseo hasta aquí. Salimos a la carretera y sigue el desnivel, pero no aflojamos. Cuando por fin coronamos, quedan unos 20 km llaneando hasta iniciar el muro, y dudamos si pararnos a esperar o seguir los 2. Al final y por diversos motivos decidimos seguir y vamos cazando gente que se nos va uniendo y formamos un grupo de 8-10 unidades. Durante 6 o 7 kilómetros vamos Carlos y yo tirando por largas rectas con viento en contra y mis piernas empiezan a quejarse. Entre la subida anterior y estas rectas voy a llegar peor de lo esperado a la última subida. Así que le digo a Carlos que afloje un poco y que nos releven los que vienen detrás. Me abro y Carlos sigue delante, no sé si no me escuchó o va muy fuerte. Yo decido arroparme en la grupeta y hacer tranquilo los últimos kilómetros previos
a la subida. Buena decisión, porque el viento pega de cara e ir tirando no es la mejor decisión para afrontar el muro de Ézaro. A falta de 3 km para meta aviso a Carlos que me paro a asegurarme que la cámara graba la subida entera, así que dejo que se vaya todo el grupo y me paro tranquilamente a encender la cámara, ponerla a grabar, colocarme de nuevo el casco y arrancar. Entro en Ézaro en solitario, ya hay muchos ciclistas por allí que han llegado y voy sorteando gente para pasar por debajo del arco que da inicio al tramo cronometrado de algo menos de 2 km para llegar a meta. Los primeros 300 metros son por buen asfalto y no demasiado duros, por lo que aprovecho para apretar un poco y ver a Carlos al final de una recta. Me pica el orgullo y decido ir a darle caza, buscando el primer puesto del equipo, aunque aún quedaba lo peor. Ya llevo todo metido pero por ahora las piernas responden y lo cazo antes de girar a la izquierda y notar como la carretera cada vez se inclina más. Buff, las piernas se hinchan y aún no hemos llegado a la peor parte. Miro hacia atrás y voy abriendo hueco con Carlos, parece que va peor que yo. Me centro en avanzar y levanto la vista para darme cuenta que un poco más adelante comienzan los rampones que dan fama a esta subida, llenos de gente y con Patri y Alex animando sin parar. Cómo me gustaría llevar un 32 en ese momento. Pero toca apretar los 
dientes y sufrir. Intento pensar en las etapas grandes del Tour, las subidas míticas al Tourmalet, Alpe D'huez... evadirme de lo duro que está siendo avanzar. Vuelvo a levantar la vista y creo que no voy a ser capaz de mantenerme sobre la bici, queda mucho. Pero con Patri y Alex animando tiro de orgullo y zigzagueo como puedo buscando un poco de aliento. Paso la zona "más dura" recordando todo lo que habíamos hablado sobre ese momento en el equipo y con las piernas machacadas llego a otro repechón de más del 20%, quizás lo más duro de la subida. Buff, y con ciclistas bajando por un lado y gente andando empujando la bici por el otro. Me voy animando y pensando que si paro ya no subo, así que pido hueco para irme colando y a paso de tortuga voy restando metros hacia la meta. Además, los que van bajando también animan y se agradece. Termino ese repecho, giro a la derecha y quedan unos 300 metros para entrar en los últimos 500 metros que ya son "más llevaderos". Sufro un montón, no sólo por el rampón ni por los 137 kilómetros que llevo, sino porque el Sol ha decidido formar parte del espectáculo y está pegando de lo lindo. Pero no tengo fuerzas ni para abrirme el maillot. Así que aprieto los cuernos de la bici y llego a la pancarta que marca 500 metros a meta... ¡lo voy a conseguir! Ahora suaviza alrededor del 10%, echo un vistazo hacia atrás y no veo a Carlos, voy a coronar 1º. La ilusión por no haberme rendido me anima a gastar mis últimas fuerzas y 
 aprieto un poco para pasar a un par de corredores y vencer el muro de Ézaro entrando en meta en 6h 07' 57" en la posición 421. Misión cumplida. Giro a la derecha hacia la zona de descanso y avituallamiento e intento coger aire, a ver si me llega a las piernas y consigo mantenerme de pie. Qué duro. Bebo un poco de isotónico, agua y cojo un plátano mientras me voy a la meta a esperar a Carlos. Con la misma cara de sufrimiento entra en meta algo más de 3 minutos después y nos felicitamos, gran etapa. Mientras recupera me cuenta que se ha caído en una de las rampas y que ha tenido que volver a arrancar. Después de 1 rato y como no llega nadie del equipo decidimos ir bajando y nos encontramos a Fer andando en las últimas rampas. Lo animamos y decide volver a subirse para acabar a lo grande la subida. Poco a poco van llegando el resto de compis, la mayoría empujando la bici y es que la subida tiene fama por algo. Por suerte, todos somos muy luchadores y cruzamos la meta con la alegría de haber coronado "el muro de Ézaro". Nos reunimos abajo, dejamos la bici en una zona habilitada con vigilancia y nos vamos a recuperar fuerzas en una carpa donde nos invitan a comer paella, carne, bizcocho... así da gusto. La comida se convierte en una fiesta, recordamos momentos vividos en la marcha y pequeñas anécdotas de la última subida, que te deja huella en las piernas y en la 
 mente. Además, en la comida van poniendo un vídeo con varios momentos y se hace mucho más ameno. Al terminar de comer nos hacemos unas fotos de equipo en la zona del podium para inmortalizar el día, que ha sido espectacular, parecido al campeonato de clubes del año pasado en Santander. Para repetir. Además, al ver las clasificaciones me entero que la subida a Ézaro ha sido tramo cronometrado y que he hecho el parcial 60º, subiendo en 12' 43", superando en 1 minuto a Indurain y Chiappucci (13'45"). A ver, ellos lo harían silbando, pero queda en el currículum...jajaja De todas formas pensé que había subido mucho peor de lo que marca el crono, se nota que fui suave todo el tiempo.
 En resumen, una carrera espectacular, de las que se te quedan en el recuerdo y con una compañía fantástica. Si para el año es similar repito seguro. Mientras, toca saborear lo vivido y seguir disfrutando de este deporte que cada día, con pruebas como esta, se hace más grande. ¡Hasta la próxima!
 LO MEJOR
- Organización muy buena, todo señalizado para no perderte.
- Sin colas en los dorsales.
- Relación calidad-precio increíble, con comida final gratuita.
- Recorrido muy chulo con una subida final digna de etapa grande de ciclismo.
- Aparcamiento cerca de la salida.
- Avituallamientos muy buenos.
- Ambiente de fiesta, participamos 1000 colegas.


LO PEOR
- Tener que parar casi 30' en Muxía, se hizo largo.
- El servicio mecánico no era perfecto, Alex no pudo seguir a pesar de romper la cubierta en la zona de meta.
- Fallos con los chips en meta, algunos no pudieron saber su tiempo.

¡Y que se repita!

PD: en breve el vídeo-resumen que grabé de la prueba...

miércoles, 22 de julio de 2015

94ª COMPETICIÓN: NORTHWEST TRIMAN OLÍMPICO: DESCONCENTRADO

Domingo, 28/6/15, 9:30 h.
II Northwest Triman (As Pontes, La Coruña)
Distancia: 1.9 km (1 v.) + 45 km (1 v.) + 10.5 km (1 v.)
Dificultad: baja
Inscripción: 30 euros (federados)
Tiempo: 2h 46' 36"
Tiempo del 1º: 2h 16' 56" (- 29' 40")
Puesto: 44º de 186
Avituallamientos: agua, isotónico, fruta, barrita
Trayecto desde Betanzos: 45 min. / 55 km
Puntuación: 9/10
Repetiría: SI (quizás en larga distancia)
CLASIFICACIÓN

Dos semanas después de los tris de media distancia en el Bierzo y Orense tocaba volver a dar la cara cerca de casa en una distancia que se me empieza a hacer corta. De todas formas, las ganas de competir con todos los tricolegas y compis de equipo hicieron que se convirtiera en una prueba muy divertida. Además, la organización es una pasada y espero volver a disputar la larga distancia un año de estos. Vamos con la crónica.
Sábado por la tarde, el punto negro bajo mi punto de vista de la prueba. Sí, la carrera es mañana, pero como se disputa 2 horas antes la distancia Ironman tenemos que ir a dejar la bici el día anterior, un marrón porque haces el viaje sólo para eso. Pero es lo que toca, así que aprovechas para visualizar la natación, las transiciones... y saludar a los amigos empapándote ya unas horas antes del espíritu tri. Por cierto, qué calor.
Domingo, 7:00 h. En pie. Desayuno, repaso la mochila (miré 3 veces si llevaba el neopreno) y para As Pontes... ¡lloviendo! Menos mal que al llegar casi no caían gotas aunque todavía no asomaba el Sol. Voy con tiempo de sobra y cometo mi primero error: me relajo. Así que empiezo a saludar, colocar las cosas y cuando intento hinchar las ruedas... se me queda enganchada la pieza que une la válvula de la rueda trasera de perfil con el hinchador. Increíble. No puedo 
sacarlo y la rueda no para de deshincharse. Decido parar cuando llevo 2 heridas en la mano con sangre y la válvula no se mueve. Pido ayuda pero la gente tampoco tiene ni idea y ya se van para el agua. Buff, bajonazo. Consigo sacar el hinchador pero la pieza que sirve para hinchar la válvula de perfil no sale y tengo que dejar la rueda trasera con la válvula abierta y deshinchándose poco a poco. Aún encima, todo el mundo está preparado para salir y no tengo tiempo ni de ir al baño, con retortijones para la salida, menos mal que estaba la novia de Pablo para dejarle la mochila. Con este panorama, sin saber ni siquiera si podría hacer la bici, me coloco de último y me lanzo al agua 15 segundos después que el resto esperando a que se me pasen los retortijones de los nervios acumulados en los últimos 10 minutos. Estrés. Aún así, noto el agua a una temperatura perfecta e intento olvidarme del resto. Hay que dar 1 vuelta de 1.9 km
haciendo una especie de triángulo dejando las boyas a la izquierda. El año pasado hice un "training camp" en este lago y aguanté nadando 200 metros por el frío. Nada que ver, el agua estaba espectacular. Empiezo a sentirme bien y voy cogiendo mi ritmo de pato, cazando a algunos grupos e intentando seguir las boyas, que están muy lejos. Hago sin muchos problemas el giro en las 2 boyas y me voy animando en la recta de vuelta sabiendo que no lo estoy haciendo rápido y con la cabeza pensando en la rueda trasera de la bici. Justo antes de salir, me pasa uno literalmente por encima... ¡pero si hay 50 metros de ancho para salir! Me cabrea tanto que me pego a él para cantarle las 40 al salir del agua. Me levanto y... ¡es fran, mi ex-compi de equipo! Me parto de risa y me pide disculpas mientras salimos los 2 corriendo hacia la T1. 36'30", parcial 103, no me quejo aunque la mayoría de mi equipo ya han salido hace un buen rato. Toca remontar... si se puede! Llego a la bici, toco la rueda trasera y... ¡sigue hinchada! De aquella manera, pero... sin pensármelo 2 veces saco el neopreno, hago todo el ritual y salgo deshojando la margarita con el "se deshincha - no se deshincha - se deshincha - no se deshincha...". Conozco el circuito y sé que en cualquier bache la cámara se puede quedar sin aire, pero tengo que intentarlo. 45 km a 1 vuelta para remontar todos los puestos posibles.
No sé qué entiende la gente por circuito llano, pero para mí este no lo es. Nada más salir, cuestita de unos 200 metros. Llaneas un par de km y luego otros 3 km para arriba y el resto del circuito rompepiernas con repecho va repecho viene. Es decir, si tienes la cabra muy entrenada puedes sacarle partido. Sino, lo único que harás será machacarte la espalda con tanto cambio de postura. Por suerte, decidí traer la MMR y arranco el primer repecho con ganas procurando no caer con la gravilla suelta. Enlazo con la carretera y llaneo un par de kilómetros por el centro de As Pontes para girar a la derecha e iniciar los 3 km de subida en torno a un 5-6%. Voy pasando gente pero no me encuentro cómodo, las piernas no van "alegres" y me gusta subir. No sé si será por la rueda o por el estrés acumulado pre-carrera, pero no voy a buen ritmo. Acabo la subida e intento acoplarme en las largas rectas,
pero los continuos repechos me hacen desistir y prefiero agarrarme a los cuernos, que me empiezan a salir a mí con lo mal que me está saliendo todo. Al menos los retortijones ya han pasado. Cazo a Arturo y a Fede de mi club, pero no les consigo sacar distancia, algo falla. Además, me cruzo con unos cuántos del club (Carlos, Rober, Julio, Borja...) y me sacan bastantes kilómetros. Intento apretar pero justo tras el giro me pasa Domin como una bala y me acaba de hundir, mis piernas no responden y no soy capaz de seguir su ritmo. Es sin drafting, pero cada vez me saca más. Definitivamente no es mi día. Además, en los repechos no consigo levantarme a gusto y pedalear con cadencia, me quedo muy clavado, aunque la rueda aguanta. Intento minimizar el daño todo lo que puedo para bajarme con alguna oportunidad a correr y adelantar a unos cuantos tricolegas, pero sólo consigo mantener el ritmo y llegar a la última bajada viendo a toda la marea rojilla en pleno sector de carrera. Muy difícil cogerlos. Me bajo en la línea de transición con una mezcla de rabia y alegría porque he podido terminar el sector ciclista, aunque mis compañeros de batalla habituales en las carreras ya llevan 5 minutos corriendo. Así que apuro todo lo que puedo y salgo disparado para completar los últimos 10.5 km de carrera a 1 vuelta por un circuito de tierra que solamente tiene un repecho duro de 50 metros.
Intento apretar desde el principio, pero se me contagia el ritmo de la bici y las piernas no van. Me conformo con que no me dé un punto y al menos me distraigo con los cartelitos que marcan cada kilómetro buscando mini-objetivos y viendo a los favoritos ya de vuelta, entre ellos mi compi Fady peleando por la 3ª posición (que finalmente conseguiría!). Me gusta el circuito de carrera, la zona de tierra me recuerda el trail pero no voy cómodo y consigo adelantar a duras penas. Paso a Domin sobre el km 3 y me tomo el gel con cafeína, a ver si reactiva mis piernas, pero sigo igual. Sobre el km 4,5, a falta de 1 para el giro, me cruzo a mis compis de batalla: Juan, Julio, Carlos, Rober... en cualquier otro momento hubiera pisado el acelerador con las ganas de cogerlos, pero no es mi carrera, sigo centrándome sólo en pasar al de delante. Giro y ahora que sé lo que queda decido apretar los dientes y parece que funciona a medias, porque a falta de 3 kilómetros cazo a Rober y Carlos del club, que hacen la carrera a la inversa que yo pero que esta vez están corriendo bien y casi no los cojo. En el único repecho de vuelta no soy capaz de subir fuerte y en la recta no veo a nadie de mi club, esta vez se me han escapado y no habrá gran remontada. Aún así, en el último kilómetro, ya enlazando con la carretera que da acceso a la recta de meta, veo a los tres últimos objetivos posibles para remontar las últimas posiciones. Paso a uno y cuando me fijo en el que va delante...
es mi compañero Docal que está debutando y casi ni lo pillo... ¡vaya crack! Me pongo a su altura y va fuerte, dudo si entrar en meta con él. Pero el 3º en discordia amenaza con apretar y no me arriesgo, pego el hachazo a falta de 300 metros y consigo una ventaja suficiente para entrar en meta "disfrutando" el momento y parando el crono en 2h 46' 36" en el puesto 44º, que puede no parecer malo pero en mi caso lo es. Aún así, parcial 15 de carrera (43'28") y 63 de bici (1h 22' 52"), insuficientes para coger a varios compis del club: Juan, Borja, Guille, Julio... tocó la de arena. Aún así, contento por poder finalizar y con mucha envidia de ver a otros compañeros del club disputando la larga distancia en un entorno y un ambiente como este. Ahora me doy cuenta que no tengo por qué irme a Madrid a correr una distancia Ironman teniendo una prueba tan bien organizada y con tantos amigos al lado de casa, seguramente será uno de mis objetivos de la temporada el año que viene... ¡a por la próxima!

- La organización es espectacular, de 10. Se nota que son triatletas (y buena gente).
- La zona es muy chula y el pueblo se vuelca con la prueba, se agradece.
- Aunque es un poco lioso llegar, aparcamiento cercano a la prueba. Las duchas ni idea, me fui a casa.
- El ambiente es muy bueno, no me extraña que la gente repita.
- Sin colas para recoger dorsales.
- Servicio mecánico y fisioterapia, un lujo.
- Hinchables para niños, piraguas, expo... ¡increíble!
- Tener que dejar la bici el día anterior fue lo único que no me gustó.
- El madrugón tampoco, aunque es inevitable.









En resumen, es un triatlón que ya se ha convertido en un referente en Galicia, no sólo porque es el único en distancia Ironman, sino porque con el añadido este año de la distancia olímpica y la organización y el ambiente tan espectacular tienen el "lleno" asegurado durante muchos años. Espero que no se me junten muchas pruebas en estas fechas y pueda correr mi primer Ironman aquí el año que viene... ¡nos vemos en Ézaro!

martes, 21 de julio de 2015

TEMPORADA 4 (SEMANAS 36 y 37): EN MODO XTRM

No lo voy a negar, si no fuera porque estoy apuntado al "Hércules Xtrm", un triatlón de media distancia que se celebra en mi ciudad (Coruña) y en la que participamos alrededor de 30 compis del club me habría dejado ir totalmente. El resultado habría sido la práctica continua de sillonball y la ingesta masiva de helados y bollería variada, con consecuencias catastróficas para mi cuerpo (y sobre todo para mi mente). Por suerte, estamos en una época en la que existen multitud de pruebas a las que poder poner el cartelito de "reto" y así mantenerte en forma y despierto para no dejarte llevar (del todo) hacia "el lado oscuro". Así que, a pesar de las vacaciones y el viaje de descanso, en el que no hice casi nada y abandoné el blog a su suerte, mi cabeza está centrada en llegar en un estado de forma decente a una de mis pruebas favoritas de la pasada temporada. Sí, está claro que la fecha no me cuadra demasiado bien, llevo 1 mes rascando la barriga y que está habiendo mucha polémica con los nuevos circuitos y demás, pero qué queréis que os diga, para mí poder correr al lado de casa con toda "mi gente" animando y picándome (en el buen sentido) con tantos compañeros de fatigas... ¡me apetece muchísimo! Claro, el resultado no va a ser el mismo que el año pasado, 1º del club y en el puesto 26º. Sin ir más lejos, en mi club el nivel ha subido como la espuma y acaban de quedar 3º por equipos en una prueba del circuito gallego... ¡mucha tela! Pero está claro que voy a intentar darlo todo para estar lo más arriba posible. Por eso, en estas 2 semanas he intentado minimizar el desastre y aunque no he llevado la bici de viaje (10 días) sí que he nadado algo (sin neopreno) y corrido algo más. Confío en que sumado a los meses anteriores sea suficiente para exprimirme al máximo y cruzar la meta con una sonrisa.

TEMPORADA 4 (SEMANA 36): HOJA DE RUTA

Lunes, 6/7/15: Ciclismo: 2h 30' - 66.5 km
Martes, 7/7/15: Ciclismo: 2h - 53 km + Carrera: 30' - 7.2 km + Piragua: 2h 30' - 7 km
Jueves, 9/7/15: Natación: 20' - 500 m.
Viernes, 10/7/15: Carrera: 1h 10' - 15.5 km + Natación (mar): 25' - 1 km
Sábado, 11/7/15: Natación (mar): 30' - 1 km
Domingo, 12/7/15: Ciclismo: 1h - 25 km + Carrera: 30' - 7 km

Natación: 3 sesiones - 1h 15' - 2.5 km
Ciclismo: 3 sesiones - 5h 30' - 145 km
Carrera: 3 sesiones - 2h 10' - 30 km
Piragua: 1 sesión - 2h 30' - 7 km
TOTAL: 8 SESIONES - 11 h 25'

Semana complicada, puesto que el miércoles me iba de viaje e intenté meter bici lunes y martes para rodar algo esta semana. Lo conseguí aunque el finde estuve con "mono" de pedales y alquilé una de esas bici con cestita y ruedas deshinchadas de los hoteles... ¡y me puse a dar vueltas como un loco por la urbanización! jajaja bendita locura, estaba para foto. Tampoco disfruté mucho nadando con miedo a las medusas (que las había) y dando vueltas en la piscina del hotel de menos de 15 metros, pero era lo que había e intenté adaptar lo poco que hice a las circunstancias y al calor. Aún así creo que salvé bastante bien y mantuve el tipo.

TEMPORADA 4 (SEMANA 37): HOJA DE RUTA

Lunes, 13/7/15: Natación: 1h 05' - 2.5 km + Gym: 15' gomas
Martes, 14/7/15: Carrera: 1h 15' - 16 km (series de 1 km)
Miércoles, 15/7/15: Natación: 1h - 2 km
Jueves, 16/7/15: Carrera: 1h 15' - 16 km ("series" de 15')
Sábado, 18/7/15: Ciclismo: 3h - 80.5 km
Domingo, 19/7/15: Ciclismo: 2h 30' - 77 km + Carrera: 32' - 8 km

Natación: 2 sesiones - 2h 05' - 4.5 km
Ciclismo: 2 sesiones - 5h 30' - 157.5 km
Carrera: 3 sesiones - 3h - 40 km
Gym: 1 sesión - 15'
TOTAL: 7 SESIONES - 11 h 30'


Increíble, mismo tiempo de entreno que la semana anterior. Nadando... sin sufrir, a mantener sensaciones y poco más. La bici, volviendo el viernes, pude aprovechar el fin de semana para recuperar un poco el ritmo y la verdad es que me encontré mejor de lo que esperaba y corriendo creo que con las 2 palizas del martes y el jueves a 30 grados y la transición del domingo llego bastante bien para hacer otra de mis remontadas en el sector de carrera (toco madera). Así que a pesar de la paliza que me metí en el coche ha sido otra semana decente de entrenos, espero que suficientes para el domingo.

TEMPORADA 4 (SEMANAS 36 y 37): ENTRENO INVISIBLE
Aquí sí que me he perdido. Situación: vacaciones, hotel, piscina, centro comercial, burguer king, heladerías, 100 montaditos, pizzería... y esto 10 días. Pues... menos mal que me salieron 3 entrenos buenos de carrera en los que perdí al menos un par de kilos, porque sino la báscula se habría acercado a un peso de alerta roja. Aún así, los 67 kilos que marcó el día que volví me hizo replantearme mi alimentación para esta última semana si quiero hacer unos tiempos aceptables. Otra cosa es que lo pueda cumplir, porque sigo de vacas. Eso sí, el descanso lo cumplo a la perfección, llevo 2 semanas sin poner el despertador así que en ese aspecto voy bien. Todo suma.

TEMPORADA 4: AVANCE SEMANA 38: CORRIENDO EN CASA
Qué ganas. Se acerca la hora y aumentan los nervios, surgen las dudas y se mezclan los sentimientos. Preludio de prueba grande. Estoy seguro que lo será. El año pasado fue espectacular y el domingo, a pesar de apartarnos un poco del centro de la ciudad y hacernos madrugar, el lugar, el ambiente y sobre todo los compañeros harán de esta carrera otra experiencia inolvidable. Después de los buenos entrenos del fin de semana, ésta toca recuperar, descansar y disfrutar, el trabajo ya está hecho y la meta es conseguir llegar en la mejor forma posible al disparo de salida y pelear por bajar el crono del año pasado. Los circuitos son diferentes, pero hay que buscar algún objetivo, no? Como ya he dicho, los piques con los tricolegas están asegurados y confío en que las piernas respondan para cruzar antes la meta y que al menos inviten a unas cañas... Nos vemos el domingo, buena semana, salud y kilómetros!!


martes, 7 de julio de 2015

TEMPORADA 4 (SEMANA 35): VERANEANDO

Después de competir en el triatlón olímpico de As Pontes y con las vacaciones ya iniciadas, puedo decir que la temporada competitiva casi ha terminado. Por delante, disfrutar de los entrenos, "competir" divirtiéndome y terminar la temporada en las mejores condiciones físicas y (sobre todo) mentales posibles. Y eso lo he cumplido a la perfección esta semana, haciendo lo que me apetece y pasándolo en grande en la cicloturista de Ézaro del sábado con los compis del Triatlón Coruña. Firmo por más semanas como esta. Ya ha entrado en acción el kayak, con el que disfruto como un enano y estoy buscando de hacerme con uno (con los que ando son prestados por el club de piragüismo del que soy socio) para hacer alguna travesía corta y salidas cerca de las playas, aumentando deportes por si no me llegan... a ver si no me echan de casa. Y es que el cuadriatlón de Cantabria es en octubre y me apetece bastante, a ver cómo llego. Por lo de pronto, a seguir veraneando igual de bien como hasta ahora y con este tiempo tan bueno. Go!

TEMPORADA 4 (SEMANA 35): HOJA DE RUTA

Lunes, 29/6/15: Natación (mar): 25' - 1 km
Martes, 30/6/15: Carrera: 50' - 11.5 km + Natación (mar): 55' - 2.2 km
Miércoles, 1/7/15: Ciclismo: 1h 50' - 55 km + Carrera: 10' - 2 km. Por la tarde: Ciclismo: 3h 30' - 80 km
Jueves, 2/7/15: Piragua: 1h 10' - 7 km
Viernes, 3/7/15: Gym: 30' circuito + Carrera: 55' - 12 km (cambios de ritmo)
Sábado, 4/7/15: GRAN FONDO ÉZARO (Cicloturista 137.5 km): 6h 08'. Impresionante.
Domingo, 5/7/15: Piragua: 1h 30' - 7 km + Natación (mar): 45' - 2 km

Natación: 3 sesiones - 2h 05' - 5.2 km
Ciclismo: 3 sesiones - 11 h 30' - 272.5 km
Carrera: 3 sesiones - 1h 55' - 25.5 km
Gym: 1 sesión - 30' 
Piragua: 2 sesiones - 2h 40' - 14 km
TOTAL: 11 SESIONES - 18 h 40'

Sin duda la semana con más horas de "entreno", y aún encima divirtiéndome. Nadando en el mar con los compis lo paso muy bien, con la piragua tengo ganas de más y corriendo estoy en "modo mantenimiento", sin demasiadas ganas por el calor. Eso sí, en bici me he pegado un palizón el miércoles por hacerle caso a los del tiempo, aunque me ha servido para no sufrir en la cicloturista del sábado y llegar muy fresco para subir el "muro de Ézaro" sin bajarme de la bici con mi 34x25. Muy contento. Así que a seguir así, sin agobios y buscando la cara del deporte que me gusta, la de entrenar por sensaciones y diversión.

TEMPORADA 4 (SEMANA 35): ENTRENO INVISIBLE
Peso semana actual: 65.8 kg. Seguramente la parte más complicada sin rutina. Estas semanas el peso ha superado la barrera de los 67 kilos y llevo días con la sensación de tener el estómago como una pelota gigante. Pero es que casi no como en casa, lo que implica comidas familiares, cenas con los amigos... y por poco que comas, que no es el caso, la aguja sube. Por suerte los objetivos importantes ya han pasado y no tengo que esforzarme para mantener el peso, así que seguiré comiendo helados de Kinder Bueno y Ferrero Rocher cuando me apetezca...
En cuanto al gym creo que el verano tampoco va a ser la fecha adecuada para retomar la rutina. Al menos con la piragua ejercito el tren superior y supongo que algo servirá, aunque no sé si para tonificar o para cargar aún más los músculos a la hora de nadar. Sea como sea, es lo que toca.
Y sobre el descanso... cada día me acuesto a una hora distinta. Eso sí, me levanto casi siempre a las 8, tengo la "alarma corporal" del trabajo y aunque me acueste tarde "siempre suena". Tampoco me importa, me gusta madrugar y así aprovecho más el día. Eso sí, algunos estoy zombie por la falta de horas de sueño. Espero poder desquitarme esta semana en las hamacas de la piscina!!


TEMPORADA 4: AVANCE SEMANA 36: DE VACAS... ¡Y DESCANSO!
Quedan menos de 3 semanas para el "Hércules Xtrm" (el 26) y, por prescripción médica propia, toca descansar un poco para no llegar al límite del cansancio a la prueba. Por eso, aprovechando las vacaciones en Los Alcázares y a diferencia del año pasado, he decidido no llevar la bici y sí, en serio, descansar. Aunque lo pasé muy bien pedaleando por esas carreteras llanas y con arcenes anchos hace unos meses, sé que si la llevo voy a tirarme horas en la bici y volveré aún más cansado de lo que me voy. Así que esta vez la MMR se queda en casa y espero volver con ganas y fuerzas a tope para hacer una buena carrera el 26 en mi ciudad. Ahora, a relajarse, aprovechar un poco el sol para algo más que entrenar y aprovechar el agua caliente del mar para nadar sin neopreno, que tampoco viene mal. Espero sacar un par de horitas de ese descanso para escribir las crónicas de "As Pontes" y "Ézaro", con muy diferentes sensaciones pero a las que espero volver por diferentes motivos... ¡buena semana, salud y kilómetros!


viernes, 3 de julio de 2015

TEMPORADA 4 (SEMANAS 33 y 34): ADIÓS RUTINA, HOLA DESCONTROL

Al menos lo sabía, estaba avisado que a partir del 20 de Junio e "in crescendo" la rutina iba a ir desapareciendo y el control de entrenos, peso, descanso y ese largo etcétera que te permite estar a tope cada día se iba a ir disolviendo como un azucarillo hasta entrar en ese agujero negro llamado "descontrol". Fiesta por aquí, comida por allá, concierto por aquí, viaje por allá, playita por aquí... Buff, y esto acaba de empezar. Menos mal que mi "temporada seria" estaba planificada hasta el Aviaman, el resto es un plus al que intentaré llegar lo mejor posible, como sucedió con el Olímpico de As Pontes de la semana pasada en donde ya no fui como tenía que ir, así me fue. Y es que la cabeza ya no está centrada en entrenar y competir, sino en cuando me voy de viaje, a la playa y de comida familiar. Como todo, tiene su parte buena y mala. Para competir, mala. Para desconectar y disfrutar, buena. Así que la idea para estos 2 meses de verano es pasarlo bien, entrenar cuando apetezca, olvidarme de las series y la piscina, hacer alguna travesía, piragüismo y todas esas cosas que apetecen hacer pero que dejas de lado por hacer una sesión más de las que tocan. Sí, también cuesta ponerse delante del ordenador y contar "mi vida deportiva". Pero al menos lo intento y espero conseguirlo. Sin más, aquí van mis 2 últimas semanas de entrenos y en breve (espero) contaros mi aventura en As Pontes (Olímpico), paso previo a la disputa del Ironman (si Dios quiere) el año que viene en el mismo lugar... ¡qué envidia me dieron mis compis!

TEMPORADA 4 (SEMANA 33): HOJA DE RUTA

Martes, 16/6/15: Carrera (trail): 45' - 8.5 km + Natación (mar): 40' - 1.8 km + Carrera: 25' - 5 km.
Miércoles, 17/6/15: Ciclismo: 2h 15' - 60 km
Jueves, 18/6/15: Carrera (trail): 1h 10' - 14 km
Viernes, 19/6/15: Natación (mar): 1h - 2.7 km
Sábado, 20/6/15: Ciclismo: 2h 15' - 56 km + Carrera: 43' - 10 km
Domingo, 21/6/15: Natación (mar): 45' - 2.5 km

Natación: 3 sesiones - 2h 25' - 7 km
Ciclismo: 2 sesiones - 4h 30' - 116 km
Carrera: 4 sesiones - 3 h - 37.5 km
TOTAL: 8 SESIONES - 10 horas

Después de los Halfs del Bierzo y Aviaman lo lógico hubiera sido descansar, pero el martes ya me metí doble sesión de carrera "por acompañar" a los compis del club... no tengo perdón. Y así toda la semana entrenando como si mis patas estuvieran a pleno rendimiento. Eso sí, me noté con falta de ritmo y tampoco probé a forzar por si acaso. Semana aceptable en donde las piernas respondieron.

TEMPORADA 4( SEMANA 34): HOJA DE RUTA

Lunes, 22/6/15: Ciclismo: 4 h - 110 km
Martes, 23/6/15: Gym: 45' circuito + Natación (mar): 50' - 2.5 km + Carrera: 55' - 12 km (cambios de ritmo)
Miércoles, 24/6/15: Ciclismo: 2h 30' - 67 km + Carrera: 22' - 5 km
Jueves, 25/6/15: Carrera: 55' - 12 km (series de 1 km) + Natación (mar): 50' - 2.4 km
Domingo, 28/6/15: Triatlón Olímpico Northwest Triman (1.9 + 45 + 10.5): 2h 46' 36". Puesto 44º.

Natación: 3 sesiones - 2h 15' - 6.8 km
Ciclismo: 3 sesiones - 8 h - 222 km
Carrera: 4 sesiones - 2h 55' - 40 km
Gym: 1 sesión: 45'
TOTAL: 8 SESIONES - 14 horas

Y en esta quise probar algo nuevo... y no salió. Como llevo pocas pruebas este año y estoy para tirar cohetes... decidí meter mucho volumen los 4 primeros días, descansar los 2 siguientes y a ver cómo respondía en el Olímpico del domingo. Resultado... el jueves arrastrándome y el domingo el cuerpo dormido después de 2 días de descanso que no recordaba desde pretemporada. Fórmula fallida, no acerté con la tecla. Eso sí, las sesiones fueron buenas a nivel mental, sobre todo la panzada de kilómetros del lunes en solitario y las sesiones de natación en el mar que disfruto un montón (ya no me acuerdo de la última vez que fui a la piscina). El Tri... ya fue otra historia. Entre el cambio fallido de entrenos de la semana y todos los problemas que tuve pre-carrera (entre ellos hacer el sector ciclista con la válvula rota de la rueda trasera) no salió como esperaba, pero también valió de entrenamiento y para saber qué no tengo que hacer, lección aprendida.

TEMPORADA 4 (SEMANAS 33 y 34): ENTRENO INVISIBLE
Y aquí llegamos al quiz de la cuestión, ese entreno que marca la diferencia entre los que están al mismo nivel. En mi caso, ahora mismo, quedaría en el furgón de cola. ¿Peso? Ni lo sé. Entre comidas, cenas y fiestas estoy todo el día con el estómago hinchado, pasando de 65 a 67 de un día para otro. Eso sí, de 65 y pico no bajo, demasiada gula para tan poco pollo. Es lo que toca. ¿Gimnasio? ¿Con este calor? Nada, al menos estoy empezando con el kayak. ¿Descanso? Jajaja. Sí, dormir duermo, pero un día me acuesto a las 2, otro me levanto a las 8, a las 10... Buff, visto así todo da miedo, pero es mi "rutina del verano". Por eso no programé ninguna prueba importante para estas fechas, salvo el "Xtrm", al que espero llegar con un mínimo de peso, entreno y rutina para llegar a meta igual de contento que el año pasado.


TEMPORADA 4: AVANCE SEMANA 35: A POR EL MURO DE ÉZARO
Y esta semana, con las piernas cascaditas y la cabeza a todo menos a esto (viajes, bicis, coches, kayaks, familia y un largo etcétera) toca seguir dándole a las piernas y cumplir un nuevo reto, aunque no lo haya puesto con letras mayúsculas en la portada. Sí, será todo un reto subir el rampón del Ézaro en la cicloturista del sábado después de 135 km de ruta. Es más, dudo bastante que sea capaz de subir ese 1.6 km infernal. Espero que las piernas aguanten y que con la ayuda de los compis de equipo y los ánimos de la gente pueda cruzar la meta habiendo superado la prueba, aunque sea andando, a ver si el 34x25 es suficiente (lo dudo). Pero como la prueba me la tomaré en modo "entreno grupal distinto" con los compis del club tengo la intención de divertirme mucho y olvidarme de tiempos, ritmos y posiciones. También estarán Indurain y Chiapucci dando aún más color a los 1000 ciclistas que participaremos en el Gran Fondo. Y poco más, bajar volumen, mantener intensidad y... ¡buena semana, salud y kilómetros!


jueves, 2 de julio de 2015

93ª COMPETICIÓN: AVIAMAN: MENOS ES MÁS

 Domingo, 14/6/15, 9:00 h.
AVIAMAN (Leiro, Orense)
Distancia: 1.2 km (1,5 v.) + 65 km (1 v.) + 14 km (3 v.)
Dificultad: media (bici dura, 2000 +)
Inscripción: 60 euros
Tiempo: 4h 06' 41"
Tiempo del 1º: 3h 30' 21" (- 36' 20")
Puesto: 29º de 95
Avituallamientos intermedios: agua, isotónico, plátano
Avituallamiento final: agua, fanta, sandwich, fruta
Trayecto desde Betanzos: 1h 30' - 151 km
Puntuación: 9/10
Repetiría: SI
CLASIFICACIÓN

Lo 1º que tengo que decir y muy clarito es ¡GRACIAS BEARIZ TRIATLÓN! Y por varios motivos. El más importante, por hacernos disfrutar de un triatlón como este, único en Galicia. Y en lo personal, por demostrarme que sois muy grandes, tanto por la organización de la prueba como por darme la posibilidad de participar en ella cuando mis opciones unas horas antes eran escasas. Y como siempre, vamos por el principio.
Como la prueba me pilla un pelín lejos, decidimos hacer noche en O Carballiño (a 15' de la salida) y justo antes de acostarme voy a repasar de nuevo la mochila... Increíble, bajonazo... ¡me olvidé el neopreno! 11 de la noche. Neopreno obligatorio. Esto sólo me puede pasar a mí... Dudo si volver a casa a por él (2 horas ida y 2 de vuelta), pero decido probar la vía de las redes sociales. Mando wasaps a los del equipo por si alguien anda cerca y consigo que mi compi Pope me lo deje en Santiago (a 1 hora). Aún así, se me enciende la bombilla y decido mandarle un mensaje a Rómulo (Roni para los amigos) del Beariz Triatlón, club con el que me federé mi primer año y organizador de la prueba (casualidades de la vida). Con la suerte de que me contesta y 30 minutos después ya tenía varios neoprenos para elegir. Muy grandes.
Con estos preliminares llegué a Leiro a las 8 de la mañana con la única idea de disfrutar, porque horas antes me veía fuera de carrera. Además, el día estaba complicado, amenazando lluvia y con el suelo mojado, así que el sector ciclista iba a ser divertido. Voy a boxes a dejar todo y recoger "mi neopreno" (aún encima me dicen que les siguieron llegando "ofertas" y tenían más... ¡mil gracias!), me encuentro al resto de la tropa rojilla (nos han puesto a todos juntos en el box, buen detalle) y hablamos sobre qué ropa llevar en la bici tal y como está el día. Decidimos poner chaqueta todos menos nuestro crack Iñaki que va a por la carrera aunque no está entre los favoritos. Dejamos todo colocado, me pongo el neopreno (aún encima me dejan uno mejor que el mío y me entra como un guante, sin necesidad de bolsa de plástico ni nada... ¡qué pasada!) y de camino hacia la salida
cometo un error. Había 2 opciones: caminar hasta el río o ir nadando. Tal y como estaba el día y lo fría que aparentaba el agua pues seguí a la mayoría, a andar, de charla con los del "Esteiro Team" que también se habían apuntado a la fiesta, en esta ocasión Juan y Edu. Pero los más de 500 metros por la acera, hierba con pinchos y sobre todo el meneo en el puente colgante me dejó las plantas de los pies machacaditos, con un pequeño dolor en la lesión que tuve el año pasado en la fascia del pie. Mal rollo. Aún encima, llego de los últimos y tengo que tirarme rápido al agua pasando por un estado de semi-congelación los 5 primeros segundos que meto la cabeza. ¡Qué fría! Doy 4 brazadas hasta la zona de salida (dentro del agua) y sin tiempo para más, ni calentar, dan la salida... GO!
SECTOR NATACIÓN (1.2 km, 1,5 vueltas)
No me lo puedo creer, me pongo en la penúltima fila y nada más salir el de atrás se me sube encima, ¿tendrá algún retraso? En fin... me paro, dejo que pase e inicio la natación, intentando que mis músculos reaccionen y poco a poco voy cogiendo mi ritmo. El sector de natación no es complicado, el río Avia es un plato y hay que dar 1 vuelta y media a una especie de rectángulo dejando las boyas a la izquierda, perfecto para buenos nadadores, que no es el caso. Al menos consigo nadar cómodo y veo como los primeros ya vienen de vuelta a falta de unos 100 metros para el giro. Remonto algunas posiciones y me voy encontrando mejor, ya no me parece que esté tan fría y acabo disfrutando del chapuzón, saliendo por la complicada rampa de subida y parando el crono en
19'45", parcial 61, a más de 5 minutos de los primeros. El trámite había pasado. Llego al box y allí están Jesús y Pablo en pleno "probador"; que si pongo chaqueta, guantes, manguitos, calcetines... sale Jesús mientras me seco los pies, Pablo mientras me pongo la chaqueta y tras girar el portadorsal hacia atrás salgo a conquistar el mítico "coto de Xarotos" con mi MMR sin acople y mis Mavic perfil 50... ¡a volar!

SECTOR CICLISTA (65 km, 1 vuelta)
Cruzamos el pueblo de Leiro, único kilómetro llano y tras una rápida mirada al cielo que parece que va a dar tregua inicio la subida al 1º puerto del sector, Pena Corneira, algo más de 7 km al 6,5%. La verdad, no es un puerto demasiado complicado. Al hacerlo nada más salir y tener "descansos" sin fuertes pendientes se hace bastante bien. Como siempre, en los primeros
kilómetros me pasan los ciclistas que aún nadan peor que yo, vaya forma de dar pedales!! A la mitad de la subida paso a Jesús pero no veo a Pablo, debe ir como una moto. A ritmo corono Pena Corneira y poco después subo el "Alto do Sifón", casi 4 km a poco más del 5% medio de desnivel. La verdad, casi ni me enteré que lo pasaba, al ir en solitario y sin carteles ni gps no sabía ni dónde estaba pero no me pareció mucha subida. Por ahora me voy encontrando bien aunque no hay descanso, todo es subir o bajar. Ahora toca apretar frenos por una carretera local un poco bacheada y en la que tengo algún susto a pesar de ir apretando los frenos a tope. Y ahora sí, llego al plato fuerte, la subida a Xarotos, casi 7 km con un desnivel medio de un 8.4% y rampas por encima del 20%... La verdad es que cuando empiezo a subir no sé ni dónde estoy, llevo kilómetros solo pasando a algún ciclista y después de subir un 
rampón considerable que empieza a torturarme las lumbares, cazo a Juan de Esteiro y nos informan que estamos subiendo Xarotos y que "sólo" quedan los 3 últimos kilómetros, los más duros. Yo no me lo creo. ¿Ya he subido más de la mitad del puerto? Pues menos mal, porque creía que lo anterior era el "Alto de Sifón" y no sé si me iban a dar las piernas. Contento por la compañía y por lo poco que quedaba nos ponemos a charlar un poco hasta que la carretera se inclina de más y solamente podemos jadear y rezar para que se acabe cuanto antes. Ni de broma. Los que hicieron la carretera quedaron a gusto. Y no andaban en bici. Vaya tortura. Con el Sol pegando en lo alto, marcas en el suelo con un tal "19%" y unas curvas de herradura míticas de los etapones del Tour de Francia no puedo hacer otra cosa más que retorcerme en mi 34x25 levantando la cabeza y sabiendo que aún queda un mundo. Lo bueno es que hay una curva cada 200 metros, pero tras el giro hay otra, otra... interminable. Al menos sufro en compañía y no debemos ir tan mal porque cazamos a 2 de los de "bicis pros". A falta de 1 km para coronar mi espalda está a punto de estallar pero no hay descanso, o me bajo y subo andando o aprieto los dientes. Opto por lo segundo y confío en que mi cuerpo aguante el machaque. En algún momento casi no soy capaz de pedalear pero metro a metro voy aguantando y conseguimos coronar después de más de 20 minutos de etapa grande de alta montaña (ojalá hubiera tenido un 28...). Pasamos por delante del único avituallamiento en bici, que no
sé ni lo que había porque con la alegría de no parar y después de hacer un par de kilómetros en llano hasta llegar allí decidimos seguir porque hacía fresquito y pensamos que ya quedaba poco. Tocaba bajar. No voy a decir que fue peor que subir, pero casi. Mucha curva, algo de frío, demasiada velocidad... tocó quemar freno y escuchar cómo cantaban mis mavic de carbono. Así durante unos cuántos kilómetros donde nos pasaron algunos ciclistas que arriesgaban más que nosotros (no es difícil) y ya en el tramo final de la bici enlazamos con el tramo de ida y tocó volver a subir Pena Corneira pero al revés, 6,5 km al 4% de desnivel medio. El machaque de piernas era considerable pero las ganas de llegar y el saber que lo peor ya había pasado hizo que pusiera la marcheta y Juan se puso a rueda. Zapatilla y a cazar corredores. Al igual que la 1ª subida, no es un puerto duro si llegas con fuerzas y con un desarrollo adecuado, con mi 34x25 más que de sobra. Coronamos y ya sólo quedaba otra bajadita peligrosa de las de dolor de manos de tanto apretar los frenos y subir un mini-puerto de 1 km al 6,5%. Aquí me vi tan sobrado que lo hice a plato, os podéis imaginar que no era muy duro. Aún así eché el resto para llegar a la T2 parando el crono de este sector en 2 h 50' 40", parcial 43; no está mal pero casi 30' más que mi compi Iñaki (que a la postre fue el ganador) y el mismo tiempo que mi compi Pablo al que no dí cazado en toda la bici, vaya carrerones se marcaron. Y tras despedirme de Juan al bajar de la bici y colocar a la flaca en su sitio, fuera casco y gafas
chaqueta, coger un gel, poner las zapas, giro de dorsal y... ¡a remontar!

SECTOR CARRERA (14 km, 3 vueltas)
Por delante, 3 vueltas a un circuito "llano" por los alrededores del río, pero con trampa: tramos de tierra, escaleras, giros continuos y sobre todo una zona incómoda y resbaladiza de piedras en las que tenías que ir muy atento para no jugarte un tobillo. A pesar del machaque en la bici las piernas no van tan mal. Eso sí, al principio les cuesta coger ritmo. Pero en cuánto veo a mi compi Pablo en el puente a unos 300 metros se activa el modo caza y captura y acelero a remontar puestos. Ya no hay vuelta atrás. A tope. Cruzo el puente, paso una zona de tierra, las piedras resbaladizas y de nuevo en la zona de tierra ya lo tengo a menos de 50 metros. Cruzamos otro puente y lo cojo. Hablamos un poco y se pone a rueda. Vamos así
durante 500 metros por una zona de "trail" llana hasta que escucho un "dale Jose" y se queda. Así que decido apretar un puntito más y buscar nuevos objetivos. Subo por unas casas, callejeo por Leiro y enlazo con la larga recta hacia meta pegada al río por donde se hizo la natación. Paso por meta y allí está Patri con los de Esteiro animando un montón. Me tomo el gel con cafeína, bebo un vaso de agua y sigo fuerte, con ganas y paso a Roni, al que le aviso que aún me queda otra vuelta, para que siga tranquilo y no trate de seguirme (él estaba peleando por el top-10, qué crack). Ahora que ya conozco el circuito sé cuando tengo que apretar y cuándo regular, aunque no me concedo muchas licencias y llevo la máquina a pleno rendimiento, por lo que no dejo de adelantar a corredores sabiendo que estoy haciendo una buena remontada. Parece que el tri del Bierzo de la semana pasada no pasará factura y el ritmo es bueno. Además, los ánimos de la gente en algunas zonas siempre ayuda y ni siquiera la zona de piedras resbaladizas me quita la sonrisa. Mientras voy por el borde del río escucho como mi compi Iñaki gana la prueba... ¡con 23 años! ¡vaya futuro! ¡y vaya presente! Avanzo aún con más ganas y completo la 2ª vuelta escuchando "¡buen ritmo!", "sigue así" y me dispongo a dejarme el resto en la última vuelta. Aquí cazo a alguno que intenta pegarse a mi estela pero consigo "dejarlos de rueda" acumulando lactato y gotas de sudor a partes iguales, las piernas ya no están para muchas alegrías y hay algún momento en que decido aflojar un pelín para 
tener un último cartucho en la última recta hacia meta. En el callejeo por la ciudad  cazo a los 3 últimos corredores que apretaron para que no los pillara pero lo consigo e iniciamos la recta final de unos 500 metros los 4 juntos, con los gritos de ánimo de Jacobo del Beariz. Cambio de ritmo y solamente me sigue uno, los otros 2 ya ni lo intentan. Mantengo y el que viene conmigo acelera aún más. Intento seguirlo pero no puedo, va demasiado fuerte y decido aguantar a 4 o 5 metros para pegar el hachazo final. Pero pasan los metros y el otro no cede, sigue a tope y mis piernas no dan más, así que me conformo con aguantar la posición y entro en meta en el puesto 29º con un crono de 4h 06' 41" (con el 7º parcial de carrera en 56' 16"). Fundido. Pero muy contento. Allí está Patri, que me cuenta que ganó Iñaki y que he entrado entre los 30 primeros. Mientras voy a coger el avituallamiento entra Pablo a sólo 3 minutos (vaya mejora con respecto al año pasado) y nos quedamos charlando un rato. También entra Juan el de Esteiro y cuando empieza a hacer acto de presencia el frío decido ir a darme una duchita (increíble, no había casi nadie y el agua estaba caliente!!) y volver después a la zona de meta a devolver el "neopreno salvador" a la novia de Ronie... ¡les debo una (y de las buenas)! Me quedo un poco más pero Jesús aún no ha llegado y como se hace tarde nos vamos a comer con la emoción de haber participado en uno de los tris más duros y bonitos desde que estoy metido en esto. Sin duda que es de los de repetir. Y espero poder hacerlo.
 - Organización de lujo, por y para el triatleta
- Aparcamiento cerca de salida/meta
- Sin colas para los dorsales
- Duchas con agua caliente
- Circuitos chulos, el de la bici de etapón ciclista
- Ambiente, entre amigos
- Speaker, qué forma de animar, otro lujo
- Tramo hasta salida de la natación complicado, mejor ir nadando
- Tramos de carrera algo peligrosos con las piedras mojadas
- Algunas bajadas en bici algo peligrosas para un torpón como yo
En resumen, es difícil dar más por menos. Un triatlón hecho por la "familia del Beariz" que sin duda se ha convertido en todo un referente en Galicia por algo. Y a nivel personal estaré eternamente agradecido a Ronie y compañía por su amabilidad y compañerismo que me permitieron participar y disfrutar de una prueba única y a la que seguramente volveré dispuesto a coronar de nuevo el mítico "Coto de Xarotos"... ¡hasta la próxima!