IV TRAIL TERRAS DO MANDEO
Lugar: Betanzos (La Coruña)
Distancia: 21 km (tb. distancia 14 km)
Dificultad: media - baja
Desnivel: 1800 metros acumulado
Inscripción: 15 euros
Tiempo: 1h 50' 07"
Tiempo del 1º: 1h 48' 34" (- 1' 33")
Puesto: 3º de 150
Avituallamientos: agua, isotónica, fruta...
Puntuación: 9/10
Repetiría: SI
CLASIFICACIÓN
Nutrición en carrera: 1 vaso de agua
Ropa utilizada: mallas cortas, perneras y calcetines hoko, camiseta CAS y cinta compressport
Zapatillas utilizadas: Adidas Raven Boost
Entreno con dorsal. Esa fue la idea que me hizo anotarme, en el último momento, al trail de mi casa. Y es que a pesar de estar en la semana de reposo tras la ultra del Courel, mi cabeza no dejaba de taladrarme para que no dejase escapar por 4ª vez mi participación en la carrera de mi pueblo, con la salida a 100 metros de casa y el recorrido por mi hábitat de entrenamiento, Chelo y sus caminos. Imperdonable. Así que, a pesar de no saber cómo iban a responder mis piernas, me animé y el viernes ya tenía la idea en la cabeza de "darle cera". Y es que los amigos y conocidos que participaban calentaron demasiado el ambiente los días anteriores, tanto como para probar "a ver qué pasaba". Así que me enfundé la camiseta del CAS Montaña, elegí zapas para la ocasión y sobre las 9:00 bajé con calma a por el dorsal, saludé a unos cuántos amigos y volví a casa a prepararme para la batalla. Qué gusto, todo al lado como en un entreno, ayuda a aliviar la tensión.
A las 9:45 h. bajo de nuevo con mucha calma y en 2 minutos entro en ambiente, con un montón de conocidos y más de 300 corredores entre la carrera larga (21 km) y la corta (14 km). Salimos todos juntos y no tengo ni idea de quién va a una o a otra. Es igual, saludo a los amigos, nos deseamos suerte y me pongo en primera fila. ¡Acción! Sin calentar (imposible con todos los amigos que están: Docal y Elisa, Bruno, mis compis del CAS, Domin, Pablo...), Diego sale a tope. Buff, sin respiro desde el primer segundo. Salimos de la plaza del Campo, centro de Betanzos, dirección Os Caneiros, un recorrido que hago todas las semanas desde hace años, me conozco cada piedra. Aguanto el envite y saliendo del pueblo ya vamos un grupo de unos 12 corredores, salvando el primer repecho aún en asfalto. Km 1, nunca lo había hecho tan rápido; llegamos a la zona de tierra y el camino se estrecha, fila de a 1. Vamos por debajo de 4'/km e increíblemente mis piernas no se quejan. Sé lo que viene. Intento bajar pulsaciones. 500 metros
fáciles por un terreno ondulado y giramos a la derecha, empieza la fiesta. Km 2, una cuesta de 1 km con algún descansillo pequeño que si te calientas te deja fundido. Intento seguir el ritmo de los primeros y me coloco 4º, aquí se empiezan a definir las posiciones y "los que iban de farol" se van quedando. Los 3 primeros (Turnes, ganador algún año de la prueba; Abuín, de mi club y otro corredor) forman la cabeza de carrera y yo me mantengo a unos 20 metros, con Iván del Sada. Los tengo ahí pero la subida es larga y la conozco, voy a ritmo e Iván se queda. Corono a unos 50 m. de cabeza y me caza otro corredor. 300 metros llanos por asfalto para recuperar y bajada por el monte, aquí se me escapa el 4º y los 3 primeros desaparecen, para variar. Me quedo sólo en 5ª posición y a pesar de que arriesgo un poco, la distancia aumenta. Termina la bajada y de nuevo en asfalto rampón de enlace por carretera de más de un 15%. Los veo y van corriendo,
yo me pongo a caminar si no quiero reventar antes de tiempo. Miro hacia atrás y no viene nadie. Tan pronto y más solo que la una. Giro a la izquierda y toca otro kilómetro hacia arriba por pista forestal, que hago a ratos andando y a ratos corriendo. Km 5, pasamos de subir a una bajada por pista ancha con un tramo final algo más técnico con mucha rama para llegar al avituallamiento, km 6, en el área recreativa de Chelo, donde se separan larga y corta. Lo tenía claro, los 4 que van delante son de la larga, así que después de saludar a los "reponedores de energía" sin tomar nada y de 300 metros por pista inicio la cronoescalada de la carrera, sabiendo lo que me voy a encontrar a cada metro. La subida a la Espenuca es como un "mini km vertical", 600-700 metros en los que salvas un desnivel importante y que, obviamente, hay que hacer andando. La subo a ritmo, pero no veo a los de delante (ni a nadie por atrás) en ningún momento, llego arriba y no hay nadie, es la 1ª vez que me pasa, nadie en el alto del pico más duro de
la prueba. Los siguientes km son una mezcla de bajada rápida por pista forestal mezclados con otros tramos algo más técnicos por el medio del espectacular bosque de Chelo, en los que tengo algún susto que otro por arriesgar demasiado en algunas zonas que no conocía. Por suerte, llego al borde del río de una pieza y sigo en solitario. Toca volver corriendo hasta el área recreativa de Chelo (km 12), bebo un poco de agua, cruzo el puente y nos meten por otro camino que no conocía... ¡lo que me queda por conocer! Faltan 9 km y ya me he hecho a la idea de lograr una fantástica 5ª posición. Con este pensamiento
inicio otro tramo de subida estrecha por monte y a lo lejos veo a otro corredor. Increíble. Poco a poco le voy recortando y veo que es Abuín, de mi club, que imaginaba que estaría peleando por la victoria. El camino no para de subir y vuelvo a caminar en algunos tramos; aún así, las distancias se acortan y en un giro, cuando lo voy a coger, de repente aparece otro corredor que se había equivocado unos metros de camino. Milagro. En 1 km acababa de pasar de una carrera en 5ª posición en solitario a estar peleando por el podium. Buff, toca bajar por pista ancha pero con piedra, rama, zanja... No importa. Echo el resto y mis tobillos tiemblan, mientras mi pierna izquierda se acuerda de la UTPE y la derecha de la UTAC. Pero en mi cabeza ya está el podium y no me despego. Km 16, último tramo de subida dura, Abuín aprieta y el otro corredor se queda; ya estoy 4º. Sé que mi compañero es muy bueno y va a estar complicado el podium, pero resbala y mi cabeza ve un signo de debilidad; le adelanto y no
responde. Cada metro de subida aumenta la distancia. Aparece el señor lactato y mi corazón va a mil por hora, pero no es el momento de flaquear. Cuando termina la subida ya le saco más de 100 metros y me lanzo "a muerte" en la bajada, con un par de derrapadas de las de "Jose, no te pases". Giro a la derecha, km 18, llaneo por pista ancha y a lo lejos veo al 2º. Mis piernas se activan... ¿de dónde sacan las fuerzas? En pequeños repechos recorto y en una zona algo más técnica y estrecha de bosque, en donde vamos adelantando a gente de la corta, lo pillo. No me lo creo. Respiro. Pequeña bajada, giro a la derecha y pisamos asfalto, a 2 km de meta. Miro hacia atrás y el podium está casi asegurado, pero ya estoy en otra guerra. Voy fundido, pero me mantengo en "modo rémora" por si afloja. Ni de broma. Así
como en el monte recorté sin dificultad, parece que el asfalto revivió a mi compañero, veterano sobre 50 años, que tira con todo lo que le queda. Aguanto. 1 km para meta. Ya voy pensando en la subida final, un rampón de 100 metros para echar el resto. Pero justo antes de entrar en el pueblo mi compañero de fatigas aumenta un puntito y mi cabeza no tiene más ganas de pelea. Se me escapa unos metros, cruzamos el puente viejo, pasamos el arco del casco viejo y llegamos a la última subida dirección meta. De repente, miro hacia arriba y más de 30 amigos empiezan a gritarme y a animar, mientras veo al 2º a unos 20 metros. Fin. Me da la risa y camino. Asumo la 3ª posición. Ellos no. Mi compi Trillo baja hasta mi posición y se me pone a gritar a medio metro, qué crack. Me reactivo y vuelvo a correr, aunque ya tarde.
Aún así, me vuelven las fuerzas, les doy las gracias, zig-zag final y cruzo el arco de meta en el centro de Betanzos en 3ª posición con un tiempo de 1h 50' 07". Objetivo más que cumplido y un podium totalmente inesperado. Por allí viene Patri a felicitarme, mi compi Domin, los del Sada... vaya subidón!! Voy a casa a ducharme, vuelvo y tomamos algo mientras esperamos la entrega de premios. En la corta, los 3 primeros del podium son colegas míos (Bruno, Sergio e Iván), así da gusto competir, doble alegría; aún encima, me dan un tronco como trofeo muy original para terminar la mañana y celebrar mi 3º podium de la temporada y, por supuesto, el más importante, en mi casa, mi pueblo y con "mi gente". Más no puedo pedir... ¡a por la siguiente carrera!
- Señalización perfecta.
- Ambiente increíble, entre amigos.
- Organización muy buena, sencilla pero perfecta.
- Aparcamiento cerca de salida/meta.
- Duchas a 300 metros en el pabellón.
- Salida/meta en el centro del pueblo, eso siempre es un puntazo.
- Gente animando en muchos puntos, siempre ayuda.
- Quizás faltó un avituallamiento sobre el km 15-16, pero suficientes de todas formas.
- La entrega de trofeos provocó algún malentendido porque había categoría de veteranos y solo entregaron premios a los 3 primeros, pero todo quedó en anécdota.
Sin duda, todo un acierto el haberme anotado a última hora y poder vivir "de otra forma" el recorrido por mi lugar de entreno habitual con un montón de colegas del monte. Y si aún encima hago podium, la sensación es fantástica. Gran prueba, anotada para el año que viene y a la que aconsejo participar si queréis disfrutar de una carrera muy bonita y con gran ambiente.
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