miércoles, 18 de diciembre de 2013

124ª SEMANA DE ENTRENO: CUERPO ESCOMBRO

Hace años, cuando jugaba al fútbol y al fútbol sala y no tenía ni idea de lo que era entrenar "de verdad", veía a los atletas tan delgados que no me lo podía creer. Sin un gramo de grasa, todo fibra, con la sensación de que iban a salir volando con cualquier ráfaga de viento y pulverizando los tiempos. En esa época yo me dedicaba a ir al gimnasio para sacar músculo y los denominaba "cuerpo escombro", simple cuestión estética puesto que en realidad me daban mil vueltas físicamente. Años después, metido de lleno en la rutina del entreno diario, busco y observo mi transformación de "chulo playa" a "cuerpo escombro" o como los denomino ahora, los "keniatas blancos". He pasado de varios días de gimnasio a trabajo aeróbico un día sí y otro también. No sé si la constitución es decisiva en el resultado final, pero como ya comenté la semana pasada con el inicio de la dieta, la mayoría de los élite tienen "cuerpo escombro" y pesan alrededor de 10 kg menos que su altura. Así que no me queda otra que darle caña al cuerpo y "comerme" el ansia de devorar polvorones y turrón a partes iguales. El otro día en el super quedé asustado de la compra que hice, el carro lleno y ni una chocolatina, patatas, croissants, cacahuetes... Todo sea por conseguir ser un "keniata blanco" más. Eso sí, que influya en los ritmos de carrera se verá con el tiempo.
Y relacionando temas, segunda semana de dieta y la cosa marcha mejor de lo esperado. Me refiero en cuanto a sensaciones. No puedo decir que no me apetezca comer de vez en cuando mis antiguos vicios, pero paso sin ellos perfectamente y busco alternativas. De esta forma, me he despedido de las patatas fritas de bolsa (las devoraba), las patatas fritas normales por ensalada (en la mayoría de las ocasiones), el chocolate, las magdalenas y bollería varia y los cacahuetes. No está mal. A pesar de que dije que no me iba a poner encima de la báscula hasta pasada 1 semana, a los 2 días de pesarme no aguantaba y observé con cierta preocupación cómo había engordado 400 gramos. No entendía nada. La sensación era de haber adelgazado y la báscula indicaba lo contrario. Además, el viernes tuve cena de equipo y comí para toda la semana (y para la que viene). Así que el lunes me subí a mi nueva amiga rezando por al menos no aumentar de peso. 7 días antes marcaba 68.4 kg. Para mi sorpresa el nuevo peso fue de 67 kg. Es decir, 1,4 kg menos. Increíble. Así que muy contento y a seguir. Estas semanas serán duras pero creo que lo puedo conseguir, sin prisa pero sin pausa. Eso sí, algún polvorón caerá...
Y metidos de lleno en lo importante, los entrenos de la semana fueron así:

Lunes, 9/12/13: Gym: 40' + Natación: 1h 10' - 2 km (técnica). Peso: 68,4 kg.
Martes, 10/12/13: Carrera: 50' - 11 km + 30' circuit training.
Miércoles, 11/12/13: Ciclismo: 1h 40' - 40 km + Natación: 1h 15' - 2 km (técnica).
Viernes, 13/12/13: Natación: 1h 20' - 2.5 km (técnica) + Carrera: 45' - 10 km. Sobrecarga.
Sábado, 14/12/13: Ciclismo: 2h 15' - 55 km. Arreglo de mi 1º pinchazo.
Domingo, 15/12/13: Ciclismo: 2h 40' - 76.5 km.

Natación: 3 sesiones - 3h 45' - 6.5 km
Ciclismo: 3 sesiones - 6h 35' - 171.5 km
Carrera: 2 sesiones - 1h 35' - 21 km
Gym: 2 sesiones - 1h 10'
TOTAL: 10 SESIONES - 13 h 05'

Así estoy, con las piernas temblando. Ya no por el volumen, sino por el ritmo. En cuanto a la natación, las sesiones con el entrenador se van notando y a pesar de que acabo sin poder levantar los brazos noto que voy mejorando en sensaciones, algo que el año pasado fue nulo, así que pinta bien. En el "sector ciclista" estoy muy contento porque pinché el sábado y la grupeta no se enteró, así que me tocó sobrevivir y tras 20 largos minutos conseguí ponerme de nuevo en marcha sin mayores contratiempos. Este momento lo llevaba retrasando muchos meses y para mí fue un subidón. Además, el domingo con la grupeta betanceira el ritmo fue exagerado, con medias por encima de 30 km/h. Llegué en la reserva total y me curtí para próximas batallas. Y en la carrera sigo con poco volumen pero esta semana salí con César y Emilio y el ritmo fue... como el de la bici, bajando de 4 min/km en muchos momentos. Además, el martes hicimos un circuit training de fuerza-resistencia que me dejó "cuerpo-agujeta" durante 3 días... y una sobrecarga en el bíceps femoral derecho que me impidió correr con normalidad el viernes, esperemos que se quede en un susto. En resumen, mucha caña que espero que el cuerpo asimile, porque para la semana toca repetir...
De esta manera la pretemporada está siendo buena, consiguiendo los objetivos y entrenando a tope, a pesar de pequeñas molestias musculares. El objetivo del peso va por buen camino y pronto llegarán unas semanas de vacaciones que espero que me sirvan para afinar un poquito más. Por otro lado, ya tengo bastante perfilado mi calendario de competiciones para esta nueva temporada, lo que os contaré en breve en otra noticia. Sólo puedo adelantar que la prueba reina y uno de los objetivos de la temporada la correré en mi casa, en mi ciudad, donde nací y me crié y que seguro que será un día inolvidable... ¡buena semana!

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